Realmente no sé qué escribir, sólo me apetecía entar aquí. En este remanso de paz donde me bajan las pulsaciones y puedo parar por un momento.
Porque duele. Lo que más: el orgullo, darte cuenta de que has estado engañándote a tí mismo estos meses. Lo que menos: la soberbia de reconocer que ya sabías que ese autoengaño no iba a durar mucho más.
"Not long ago you find the answers were so crystal clear
Within a day you find yourself living in constant fear".
Viene perfecta.
Y ahora veo que la temporada del monzón se acaba y que no me quedan más charcos a los que saltar. Mis aletas se decoloran. Y pongo el ojo en sitios dónde sé que me hará mal el mirar.
Dejarme llevar, eso me dicen. Suena demasiado bien. Olvidé las lecciones sobre no pensar, y tal vez el miedo al fracaso sea lo que me ciegue, pero no me salen las cuentas. Siempre me paro a pensar. Tiempo sin sentir la palabra "disfrutar"
Hace calor. No llueve más. Me quedé sin farolas que contar. Me queda algún cántico que entonar. Y no esperéis tres palabras y una rima en otro párrafo; esto es Adri crudo.
Id haciendo estómago.
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